En Club Zaudín Golf Sevilla la hípica forma parte de nuestra vida y de nuestro día a día, ¡y nos encanta! Por eso hoy queremos profundizar sobre un tipo de entrenamiento muy común y que da grandes resultados: El trabajo a la cuerda.
En el trabajo a la cuerda y al montar, es importante pedir al caballo que avance en todas las transiciones, tanto las ascendentes (de paso a trote y de trote a galope) como las descendentes (de galope a trote y de trote a paso).
Puntos importantes en el trabajo a la cuerda:
- Trabajo máximo 2 o 3 días por semana, para no sobrecargar babillas.
- No dar cuerda más de 30 minutos, evitar el exceso de trabajo.
- Sesiones con intensidad progresiva: primero calentamiento hasta llegar a la etapa de agilidad y posteriormente la relajación.
¿Qué debemos saber antes de comenzar el trabajo a la cuerda?
Adaptar el entrenamiento del caballo a su anatomía es crucial para destacar sus cualidades, preservar su integridad y sacarle el máximo partido.
Para ello, es importante valorar su equilibrio y tracción natural y adquirir conocimientos específicos sobre el animal.
Los consejos más básicos para un buen trabajo a la cuerda:
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Triángulo de control
La posición nos beneficia para controlar la dirección y la impulsión del caballo. Opcionalmente se puede usar una tralla y el triángulo de control permite una total libertad de movimiento hacia adelante y un ángulo perfecto para pedir más impulsión, disminuirla o relajar todas las ayudas, lo que permite que el caballo circule de manera natural durante el trabajo a la cuerda.
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El equilibrio
La conciencia del lenguaje corporal es esencial para transmitir el mensaje correcto a los caballos, y el trabajo a la cuerda es una herramienta efectiva para su entrenamiento y mantenimiento.
Algunos consejos de utilidad para realizar un entrenamiento de trabajo a la cuerda
El calentamiento o Stretching
El método de calentamiento es ideal para relajar la musculatura, buscar la apertura de la nuca y estirar el cuello y el dorso, lo que lo hace perfecto para empezar una sesión a la cuerda con un ritmo parejo y sin ayudas innecesarias.
La reunión
Cuando el jinete consigue dominar la impulsión, la rectitud y la técnica corporal, y logra que el caballo pueda equilibrarse y sostenerse solo, sin malestar o mala colocación corporal, se logra la perfecta reunión.
Riendas largas
El trabajo a la cuerda con riendas largas permite trabajar al caballo como si fuera montado, sin peso en su zona dorsal.
Hacia la tensión
Para lograr un aire más expresivo en el caballo es importante invitarlo a extender sus extremidades, dorso y cuello, sin excederse para mantener el equilibrio y evitar movimientos desordenados o transiciones accidentales. Esto se puede lograr con Pole Work o cavalletti con barras más separadas, aprovechar los lados rectos de la pista y tener paciencia para que el caballo entienda lo que se le pide, comenzando siempre desde un aire medio y buscando una extensión a partir de un orden.
Y ahora que sabes todo esto, ¿no te apetece ponerlo en práctica en nuestro Club?
En nuestras escuelas encontrarás los mejores profesionales para que te guíen y acompañen en el proceso. Únete a la familia y haz de la hípica tu mundo, ¡un deporte apasionante te está esperando!
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